
¿A quién no le gusta la nata montada? Hacer nata montada es mucho más sencillo de lo que puedes imaginar, aunque no es raro que, en ocasiones, pueda darnos ciertos problemas que nos echen al traste nuestra preparación.
A veces puede cortarse, otras veces bates y bates y no termina de subir. Para evitar problemas a la hora de hacer nata montada, te traemos una serie de secretos que te permitirán montar nata como si fuera un juego de niños.
Los mejores secretos para montar nata fácilmente
Si no quieres volver a tener problemas a la hora de montar nata para tus postres, tus frutas o tus platos, entonces toma buena nota de estas magníficas recomendaciones:
Temperatura
Ante todo, has de recordar que a la hora de hacer nata montada deberás asegurarte de que la nata que vas a utilizar se encuentra bien fría.
También es recomendable que el recipiente en el cual se vaya a montar la nata se encuentre frío.
Recuerda que el calor hará que la nata pierda consistencia y se vuelva líquida. Lo ideal es preparar la nata donde la temperatura se sitúe entre los 5-10ºC.
Si hace demasiado calor ambiental, entonces ayúdate de un bol con agua y hielo y en el interior introduce un bol más pequeño con la nata.
Grasa
En el mercado se pueden encontrar diferentes tipos de natas, aquellas ideales tanto para cocinar como para montar y aquellas que solamente son aconsejables para cocinar sin más.
Si deseas preparar nata montada asegúrate de elegir nata apta tanto para cocinar como para montar, es decir, aquellas que tienen un mínimo de 30% de materia grasa, descartando todas aquellas que tienen un menor contenido en grasa.
Azúcar
El azúcar será un gran aliado para evitar que la nata se corte. Puedes añadir mayor o menor cantidad según tus preferencias, pero lo que sí que es cierto es que el azúcar no debe faltar.
Comienza en primer lugar a batir la nata hasta que consiga mayor consistencia y después añade un poco del azúcar que tengas reservado.
Continúa batiendo y después añade el resto de azúcar hasta lograr montar la nota totalmente. El azúcar no es indispensable, pero con este ingrediente te será mucho más fácil y rápido.
Estabilizadores
Si no vas a tomar tu nata montada al momento es posible que pierda cuerpo. Para evitar que esto suceda puedes ayudarte de estabilizadores para que su consistencia persista.
Entre los estabilizadores más recomendables puedes utilizar leche en polvo, gelatina neutra en polvo o estabilizante de nata.
Aire
La clave a la hora de preparar nata montada, ya la realices a mano o en la batidora, no es tanto moverla, sino ser capaz de llevar a cabo movimientos que faciliten su aireación.
La nata sube por el aire que le comienza a entrar, de ahí que sea tan importante batir la nata de tal manera que se consiga la mejor aireación, ya que es lo que provoca que suba su volumen.
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Cocinillas extrema y mamá de dos gatos. Hace 5 años que escribo en Ollasarten.com: recetas que me gustan, reviews de cacharros, truquitos y consejos para los amantes de la cocina. Puedes contactar conmigo a través del correo o de nuestra página de Facebook.